Con la llegada del invierno, aumenta la circulación de virus respiratorios como la influenza, lo que eleva el riesgo de contagios graves, especialmente en grupos vulnerables. Ante la pregunta recurrente “¿Me vacuno o no me vacuno?”, el Dr. José Retamal, urgenciólogo y subdirector de Operaciones Médicas de RedSalud entrega una respuesta clara: sí, vacunarse es fundamental.
«Vacunarse en invierno es clave porque las enfermedades respiratorias, como la influenza, circulan con mayor intensidad en esta época. La vacuna reduce significativamente el riesgo de enfermar gravemente, hospitalizarse o incluso morir, especialmente en grupos de riesgo», explica el especialista. Además, enfatiza que vacunarse no solo protege a quien recibe la dosis, sino también a quienes lo rodean, ayudando a disminuir la circulación viral en la comunidad.
Mitos comunes y la verdad detrás
El Dr. Retamal también se refiere a los mitos más frecuentes que circulan en torno a las vacunas. Uno de ellos es la creencia de que “la vacuna provoca la enfermedad”. El experto aclara que esto es completamente falso, ya que las vacunas contienen virus inactivos o fragmentos del virus que no pueden causar la infección.
Otro error común es pensar que “las vacunas son innecesarias si uno tiene buena salud”. Según el urgenciólogo, incluso personas sanas pueden contagiarse y desarrollar complicaciones, además de ser vectores de contagio para otros más vulnerables. “Vacunarse es un acto de responsabilidad individual y colectiva”, sostiene.
Frente a las preocupaciones sobre posibles efectos adversos a largo plazo, el Dr. Retamal es tajante, «No hay evidencia científica que relacione las vacunas contra la influenza o similares con efectos adversos a largo plazo«, confirmó. Las vacunas son sometidas a rigurosos estudios y monitoreo constante. Los efectos secundarios más comunes como dolor en el brazo o fiebre leve son temporales y mucho menores en comparación con los riesgos de una enfermedad grave. Incluso enfatiza en que «los beneficios de vacunarse superan con creces cualquier riesgo potencial».
¿Quiénes deben vacunarse?
El llamado a vacunarse es especialmente urgente para los grupos de riesgo tales como, adultos mayores, niños pequeños, embarazadas, personas con enfermedades crónicas (como diabetes, asma, hipertensión) y personal de salud.
«También es recomendable para cualquier persona que quiera prevenir el contagio y evitar complicaciones respiratorias durante el invierno», informó.
¿Debilitan las vacunas el sistema inmune?
Al contrario de lo que algunos piensan, las vacunas no debilitan el sistema inmunológico, sino que lo fortalecen. «Las vacunas no debilitan el sistema inmunológico, al contrario, lo fortalecen. Funcionan entrenando al sistema inmune para reconocer y combatir un virus específico sin causar la enfermedad. Así, cuando el cuerpo se enfrenta al virus real, ya está preparado para defenderse de forma más eficaz y rápida», concluyo el subdirector de Operaciones Médicas de RedSalud