El Ministerio de Transportes anunció la implementación de un plan piloto para fiscalizar la circulación de scooters eléctricos, cuyo uso se ha masificado especialmente en la Región Metropolitana. La medida busca controlar la velocidad de estos vehículos, además de verificar su asistencia y tipo de alimentación.
La fiscalización se realizará utilizando el dispositivo SC-25, desarrollado por el Instituto Inacap, que permitirá medir en terreno la velocidad máxima de los scooters eléctricos. El plan tendrá una marcha blanca de cinco meses en Santiago, tras la cual podría extenderse a otras regiones.
Desde el Ministerio indicaron que, en caso de detectar scooters eléctricos que superen la velocidad permitida, se aplicarán multas que irán entre 1 y 1,5 UTM (entre 60 mil y 100 mil pesos aproximadamente). Además, existirá la posibilidad de retirar el vehículo.
Sobre el proceso de implementación, el ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, explicó que «vamos a estar mostrando el dispositivo, ir educando a las personas que tienen scooters respecto de la falta en la cual están, y luego vamos a pasar a un periodo ya de fiscalización con multas y retiro».
Aunque aún no se ha establecido una fecha exacta para el inicio de la fiscalización, se espera que tras la experiencia en Santiago, la medida se replique en otras zonas del país.